Candidato enfrenta crisis de lealtades

Calleja en la contienda electoral sin el apoyo de todas sus bases

El presidenciable de Arena la tiene difícil. La tensión que se produjo antes de las elecciones internas, entre julio 2017 y abril 2018, lo ha dejado debilitado. La razón: el apoyo que acumuló Javier Simán, quien compitió contra Calleja, siguió vigente hasta varios meses después de la contienda. Tanto Simán como Calleja representan dos grupos históricos de financistas del partido que no trabajaron en armonía.

Lourdes Quintanilla
07/01/19

Arena se dirige a las elecciones presidenciales con heridas que siguen abiertas. El candidato elegido en abril de 2018 por los miembros del partido, Juan Carlos Calleja Hakker, aún enfrenta la desconfianza de un grupo de afiliados al partido que incluso había dudado de sus aptitudes desde un inicio.

El partido, conservador y defensor de la iniciativa privada, no ha podido camuflar el descontento que dejaron la campaña y la elección de candidato presidencial. Ahora, la parte más visible de esa inconformidad remanente son los que se hacen llamar Patriotas_sv, que manifiestan una fuerte lealtad a Javier Simán, el contrincante de Calleja durante la aspiración a la candidatura. Este todavía es un grupo minoritario, pero otra fuente que se mantiene en la dirigencia del partido, indicó: “Esa es la gente de Simán”. El temor es que, al final, esto pueda convertirse en menos votos.

Lo advirtió Milagro Navas, por ejemplo. Ella es directora de Asuntos Municipales en el Coena y también es presidenta de la Corporación de Municipalidades (Comures, organización que aglutina a las alcaldías). Navas fue clave para el ascenso de Calleja en el terreno. “Lo que veo es una unificación y se está trabajando en el territorio”, explicó la alcaldesa. Eso sí: Navas aclaró que aún hay sectores que siguen con la decepción después del proceso. “Ellos están resentidos porque no quedó Javier y ellos no creo que van a ir a votar”, sospecha la alcaldesa.

En Arena, desde las elecciones del Coena actual en 2016, fue posible advertir con mayor claridad que hay dos corrientes en el partido que aspiran a mantener el control. En esencia, son grupos empresariales y familiares que tienen una larga historia con el partido y sus fundadores: han tenido cargos en el Gobierno, en gremiales empresariales y en organismos de naturaleza civil pero con influencia política. Además de que aportan dinero, también crean redes de lealtad con los mandos medios y, como consecuencia, con los contactos que tienen los afiliados en la base. Por eso ahora, con la obligación a celebrar elecciones internas, para el público fue posible advertir cómo hay grupos que compiten por tomar las riendas del partido.

FOCOS entrevistó a dirigentes, legisladores y personas allegadas a Simán y a Calleja. La mayoría coincidió en que las reformas intern