Embarazos en niñas y adolescentes aumentaron en el primer semestre del 2021
Entre enero y junio de este año, el Ministerio de Salud registró 6,938 niñas y adolescentes embarazadas, principalmente en las edades de 10 a 14 años.
La Organización de Mujeres Salvadoreñas por la Paz (Ormusa) emitió un comunicado anunciando el incremento de niñas y adolescentes embarazadas en comparativa al 2020, donde se contabilizaron 6,839 en el mismo período. En promedio, diariamente se registraron 38 niñas y adolescentes embarazadas.
Nueve de los 14 departamentos del país reflejaron un incremento en el grupo de niñas y adolescentes en edades de 10 a 14 años y en el grupo de 15 a 19 años. Las cifras más elevadas de estos dos grupos se concentraron en San Salvador (1,077 niñas y adolescentes), Sonsonate (785) y Santa Ana (594).
“Esta situación puede ser el resultado de menos acceso a anticonceptivos al analizar las cifras compartidas por el Ministerio de Salud; así como el incremento de la violencia sexual en el grupo de 10 a 14 años”, dice el comunicado del Observatorio de Derechos Sexuales y Derechos Reproductivos de Ormusa.
Keyla Cáceres, activista feminista y especialista derechos sexuales y reproductivos en nuestro país advierte que los embarazos en niñas menores de 14 años son el resultado de agresiones sexuales. “Una niña de 14, 13, 12, 11 o 10 años, no es una niña con decisiones propias de la que podamos decir que tiene todas las herramientas para decidir llevar a cabo un embarazo”, afirmó.
El comunicado de Ormusa reafirma que un embarazo en el rango de edad de 10 a 14 años debe ser considerado una agresión sexual. Silvia Juárez, representante de la misma organización dijo que la vulnerabilidad de las niñas entre 10 y 14 años se debe en gran medida a la cultura de violencia que se maneja en el país y la cultura de violación naturalizada donde se culpabiliza a la niña por los hechos.
“Hay una cadena de violencia, desde el acoso sexual al que se ven cotidianamente expuestas las niñas, le sigue en nuestro país la violencia y la agresión sexual”, dijo Keyla Cáceres, quien afirmó que la violencia sexual es uno de los patrones más naturalizados en la sociedad salvadoreña, con agresiones frecuentes como tocamientos a las niñas y adolescentes y la introducción de los dedos en sus genitales.
Según Keyla Cáceres, ninguna mujer de este país puede negar que ha experimentado acoso sexual en cualquier momento de la vida, muchas veces incluso a partir de los 8 o 9 años de edad, esto como consecuencia de un acto normalizado en gestos como piropos en las calles y en las casas.