El día que Costa Rica desmintió a Nayib Bukele
“Costa Rica manifiesta su preocupación por las declaraciones del Presidente de la República de El Salvador del 5 de mayo 2020 en las que hizo referencia a las prácticas y estándares que el país utiliza para la aplicación de pruebas para la detección del COVID-19”. Así inició el pronunciamiento que hizo público la presidencia de Costa Rica después que el mandatario salvadoreño, Nayib Bukele, dijera que el vecino centroamericano había aplanado su curva de casos en la pandemia porque realizaba menos pruebas.
El choque con Costa Rica es un nuevo capítulo en los incidentes diplomáticos que el presidente salvadoreño genera desde que inició la emergencia por Covid-19, antes había tenido roces diplomáticos con México, Guatemala, Ecuador e Italia.
El más reciente, con Costa Rica, hizo además que funcionarios y académicos costarricenses se pronunciaran en redes sociales sobre las declaraciones de Bukele.
«El clásico ejemplo de un ignorante -con todo respeto Sr. Presidente- hablando de lo que no sabe», publicó María Ávila, ex ministra de salud de Costa Rica, en su cuenta de Twitter, después de escuchar lo que Bukele dijo sobre su país.
«Las declaraciones del Presidente Bukele son declaraciones que no tienen ningún fundamento. Los datos manifestados por el presidente Bukele se alejan de toda realidad», expresó el canciller Rodolfo Solano la mañana del 6 de mayo en el programa matutino costarricense “Nuestra Voz”. Solano dijo que se comunicarán con la cancillería salvadoreña para hablar sobre el tema y expresar su preocupación sobre la imprecisión de los datos brindados por Bukele en cadena nacional.
Los dimes y diretes diplomáticos
Lo de Costa Rica fue inédito, ya que en otras ocasiones no existieron reclamos diplomáticos oficiales. A inicios de abril el presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, también increpó a su homólogo salvadoreño después que este dijera que muchos de los casos de Covid-19 en El Salvador eran «importados» desde el país vecino.
«Quisiéramos que el presidente Bukele nos diera más información y no solo tuiteara», dijo el 9 de abril. Días después tiró una indirecta en su cuenta de Twitter en una foto.
Un día antes, el 8 de abril, Bukele dijo en cadena nacional que el sistema de salud y el gobierno de Ecuador habían colapsado debido a la pandemia por Covid-19 y mostró en señal abierta videos de supuestos ciudadanos ecuatorianos quemando a sus familiares muertos en la calle.
Las afirmaciones causaron malestar entre periodistas en Ecuador, que aseguraron que eso era falso. «NO, señor Nayib Bukele. En este país NADIE LE HA PRENDIDO FUEGO AL CUERPO DE SUS SERES QUERIDOS, TIRÁNDOLES GASOLINA. Tenga un poco de respeto por los muertos y sus familias», expresó el periodista ecuatoriano Luis Eduardo Vivanco.
A mediados de marzo, Relaciones Exteriores de México se mostró ofendido después que Bukele acusó al gobierno mexicano de mandar un vuelo a El Salvador con 12 ciudadanos salvadoreños que supuestamente habían dado positivo de de coronavirus.
«Qué irresponsables las autoridades mexicanas. Esos pacientes deberían estar aislados, no circulando en el aeropuerto», dijo Bukele.
«Presidente Bukele: el vuelo AVIANCA que menciona se canceló porque se suspendieron todos los vuelos a San Salvador. ¿Podría usted compartirnos cuales son los 12 casos de coronavirus que menciona y dónde se confirmaron? Es lo responsable en este y en cualquier otro caso», respondió, también a través de Twitter el canciller mexicano Marcelo Ebrard. Nunca se volvió a hablar de ello.
Al final, Ebrard desmintió a Bukele, aduciendo que no encontraron casos positivos entre los pasajeros.
Al final, el tema se olvidó. Igual pasó cuando Bukele ocupó una nota del Daily Telegraph, en la que se aseguraba, con base a un documento de la región de Piamonte que no estaba aprobado aún que en toda Italia se tomaría la política de no brindar cuidados médicos a todos los pacientes con covid-19. Según la nota se estaba pensando, sí la situación se volviera más crítica, en aplicar criterios para acceder a un tratamiento intensivo permitiendo que la elección de casos individuales centrándose en aquellos en los que la relación costo y beneficio fuera la más favorable para el tratamiento médico.
Bukele, quien desde un inicio ocupó a Italia para ejemplificar los riesgos de que la pandemia se saliera de control en un país, leyó el titular de la nota y lo reprodujo: “Italia ‘dejará morir a los mayores de 80 años’ porque su sistema de salud está colapsado”. El tuit en ese momento era un mensaje directo para presionar a la Asamblea Legislativa salvadoreña para que aprobara un estado de Excepción en el país.
La respuesta italiana fue casi imperceptible: La embajada de Italia en El Salvador, a través de su cuenta oficial en Twitter, desmintió la nota, la que calificó de “Fake News” y al mismo presidente bukele respondiendo a su tuit inicial: “(…) A pesar de la situación (el sistema de salud italiano) no abandonará a nadie”, se podía leer.