¿La reducción en el precio de la energía es un logro del Gobierno?
El 15 de enero pasado, la Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones, Siget, anunció una reducción del 9.74 % en el precio de la energía eléctrica.
El Gobierno se atribuyó esta baja como un logro propio, alcanzado en el marco del Plan Despegue Económico, recientemente anunciado por el Ejecutivo.
Hoy en FOCOS verificamos si realmente el precio de la energía bajó por gestiones gubernamentales.
En una conferencia de prensa ofrecida el 15 de enero pasado, el titular de la Siget, Manuel Aguilar, anunció que el precio de la energía bajó 9.74 por ciento.
El funcionario aseguró que la reducción fue posible gracias a gestiones del Gobierno.
FOCOS consideró importante verificar esta información, ya que el titular de la Siget repitió el mismo mensaje en varias oportunidades, como en una entrevista con el Noticiero Hechos, el 16 de enero pasado.
La reducción en el precio de la energía también se publicitó en las redes sociales del Gobierno como un logro de esta administración, con las etiquetas #PlanDespegueEconomico, #TrabajandoPorElSalvador, #NoNosCansamosDeResolver.
LA FACTURA DE ENERGÍA SE COMPONE DE TRES CARGOS: EL DE ENERGÍA, DISTRIBUCIÓN Y COMERCIALIZACIÓN.
El cambio en el cargo de energía es un procedimiento habitual, que por ley ocurre cada tres meses, específicamente LOS DÍAS 15 DE ENERO, ABRIL, JULIO Y OCTUBRE
Las empresas distribuidoras determinan cuánto costará el cargo de energía a través de una fórmula matemática establecida en el reglamento de la Ley General de Electricidad.
Lo que determina el cargo de energía es el precio promedio que pagó la distribuidora por la electricidad, durante el trimestre anterior al cambio tarifario.
Empresas distribuidoras de energía explicaron que la Siget aprueba las tarifas, pero no puede cambiar esos precios. Solo puede pedir ampliaciones o justificaciones sobre los montos establecidos.
También explicaron que el precio está relacionado con la tecnología que se usa para generar electricidad.
La energía renovable, como la generada por presas hidroeléctricas, paneles solares o biomasa, suelen ser más baratas que la producida por derivados del petróleo.
Aunque en los últimos 10 años El Salvador avanzó en diversificar sus fuentes de energía, aún depende de derivados del petróleo para satisfacer la demanda de electricidad.
¿Qué incidió para que la energía bajara 9.74 % el 15 de enero? Los actores del sector energético consultados explicaron que detrás de la reducción hay factores técnicos, donde el Gobierno tiene poco margen de influencia.
Incluso, una nota institucional publicada en la página web de la Siget menciona algunos de estos factores; pero su titular obvió mencionarlos en la conferencia del 15 de enero.
El precio de la energía bajó por las lluvias de octubre y noviembre del año pasado, lo que incrementó la generación en las centrales hidroeléctricas, indicaron las fuentes consultadas por FOCOS.
La nota de la Siget señala que entre octubre y diciembre de 2019, las presas aportaron el 31.08 por ciento de la energía.
En ese periodo, solo el 15.14 % de la energía se produjo con derivados del petróleo, que además estaban más baratos por la caída en el precio internacional del crudo.
La Siget asegura que también incidió el ingreso de nuevas plantas de energía solar fotovoltaica en diciembre, las cuales duplicaron la generación con esta tecnología.
Las estadísticas de la Unidad de Transacciones – la entidad que administra el mercado eléctrico salvadoreño – indican que en enero de 2019, la energía fotovoltaica aportó 13.50 gigavatios hora. Esa cifra aumentó a 38.80 en enero de este año.
Los actores del sector energético también mencionaron el aporte de los ingenios azucareros. En el periodo julio – septiembre de 2019, los ingenios no generaron electricidad, pero en el trimestre siguiente produjeron 8.62 por ciento.
Por lo tanto, concluimos que es falsa la declaración del titular de la Siget donde afirma que la reducción fue por gestiones del Gobierno.
La información recabada por FOCOS demuestra que en esta baja influyeron factores que el Ejecutivo no puede controlar, como la lluvia y el precio del petróleo.
La afirmación que parques fotovoltaicos, como Bósforo y Capella Solar, sufrieron atrasos en los permisos, los cuales luego se desentramparon con la llegada del Gobierno actual, no es verificable, puesto que ni Siget ni las empresas propietarias de esos proyectos aceptaron las solicitudes de entrevista de FOCOS.