Asamblea de Bukele impone nuevas reglas para elección de diputados a ocho meses de las votaciones
La bancada de Nuevas Ideas y sus partidos aliados aprobaron, mediante un procedimiento exprés, una iniciativa del presidente Nayib Bukele para reducir el número de diputados de 84 a 60 y cambiar el sistema de asignación de escaños en la Asamblea Legislativa. Expertos advierten que el nuevo método de distribución de curules favorece a los partidos mayoritarios, como el oficialista, y coloca en desventaja a los más pequeños o emergentes.
Una semana después de que Nayib Bukele anunciara su intención de reducir el número de diputados y de municipios en el país, la bancada oficialista aprobó la primera iniciativa, sin someter el proyecto al estudio de una comisión ni abrir el debate con otros actores sociales. Además, sorpresivamente, se introdujo una reforma para cambiar el sistema de asignación de curules.
Estos cambios impactarán directamente en los resultados de las elecciones de 2024, promoviendo la concentración de votos en beneficio del partido mayoritario y en detrimento de la pluralidad de los órganos de representación, advierten expertos en materia electoral.
La reforma al Código Electoral aprobada ayer, establece el número de diputados en 60 con sus respectivos suplentes. Y, con base en el censo poblacional de 2007, redistribuye el número de representantes que tendrá cada departamento (ver nueva distribución abajo). Además, impone el sistema D’Hondt como nuevo mecanismo para definir cuántos asientos tendrá cada partido en la Asamblea Legislativa. Este método premia a los partidos que obtienen una mayor proporción de votos con mayor número de escaños.
El sistema utilizado en El Salvador desde 1992 es el método de Hare, que funciona de manera mixta: primero, se divide el total de votos por departamento entre el número de curules que tiene el mismo. A partir de eso se obtiene un “cociente electoral” que refleja la proporción entre votos y escaños. Los asientos se asignan según los cocientes más altos, es decir, entre los partidos con mayor proporción de votos. Después de esa repartición, se asignan los escaños restantes por residuo, a los partidos que estuvieron más cerca de alcanzar el cociente electoral.
Este mecanismo permitía a los partidos pequeños o emergentes lograr algunas diputaciones, lo cual, el bukelismo lee como una violación al principio de igualdad del voto establecida en la Constitución. “Nuestro voto no ha sido igualitario, por eso es que ahora se cambia de método. Porque ¿qué democracia puede estar representada por gente que se apoyó menos? En la historia hemos visto que se han quedado personas que van a una elección popular que tienen 15 mil votos y entran personas que tienen 3 mil votos, y uno se pregunta: ¿eso de verdad es la democracia?”, dijo el presidente de la Asamblea en una conferencia de prensa, tras recibir las propuestas de reforma enviadas por Casa Presidencial
En ese mismo sentido, Buekele tuiteó: «No más diputados por residuos», haciendo referencia a que el nuevo sistema no toma en cuenta ese factor en la distribución de los curules.
Sobre este alegato, ya se hizo un análisis constitucional, señaló la abogada Erika Saldaña en su cuenta de twitter. En respuesta a la inconstitucionalidad 42-2005, que impugnaba el método de Hare bajo los mismos argumentos que ahora lo hace el bukelismo, la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia respondió que el sistema de Hare es una garantía para el pluralismo político que es esencial para la democracia.
Según la resolución de la Sala, el mecanismo que se ha utilizado hasta ahora “tiende a evitar que pueda darse el caso de una Asamblea Legislativa con diputados de un solo partido” y también señala que “la representación proporcional es la defensa del derecho de la expresión de las minorías, esencial a todo el sistema democrático”.
Consultado por una periodista de la Revista Factum sobre si las reformas propuestas por el Ejecutivo tenían una intención de beneficiar al partido del presidente Nayib Bukele en las elecciones de 2024, Castro dijo que Nuevas Ideas no necesita de reformas para obtener votos. “Los arrasamos en 2019, los arrasamos en 2021 y los vamos a arrasar en 2024”, indicó el presidente de la Asamblea.
Una encuesta de la Universidad Francisco Gavidia en el marco de los 4 años de gestión del presidente Nayib Bukele señala que la opinión de la población en cuanto a la pluralidad en la Asamblea está dividida. El 49.8% dijo que considera que lo más conveniente es que haya más diputados que apoyen al gobierno, mientras que el 43% prefiere que haya un equilibrio. Un 3.4% cree que sería mejor que hubiera más diputados de oposición en el Legislativo y un 3.8% no tiene una opinión al respecto.
Sin embargo, la popularidad del mandatario y su partido se ha mantenido a lo largo de su gestión e incluso incrementó levemente en el último año, pasando de un puntaje de 8.38 sobre 10 puntos, a una calificación de 8.58 sobre esa misma cantidad de puntos. Mientras, la calificación general de la Asamblea Legislativa, de mayoría oficialista, es de 6.99 y el puntaje de la bancada de Nuevas Ideas es de 7.12.
El mayor desgaste en términos de opinión pública lo tienen los gobiernos locales, el 60 por ciento de los cuales están dirigidos por alcalde del partido Nuevas Ideas. De acuerdo con la encuesta, el 74.6 de la población calificó como regular, mala y muy mala la gestión de su alcalde. Sin embargo, más de la mitad (61.3%) señala que, de cara a las elecciones 2024, prefiere que se cambie de candidato, mas no de partido.
Dora Martínez, presidenta del Tribunal Supremo Electoral, se pronunció esta mañana, indicando que giró instrucciones a los responsables de desarrollar el Plan de Elecciones 2024, para que realicen las modificaciones pertinentes, a fin de aplicar los cambios que surgen de las reformas aprobadas por la Asamblea.
Menos representantes a nivel departamental
El experto electoral, Malcolm Cartagena explicó a Focos que reducir el número de diputados en la Asamblea Legislativa sin cambiar las circunscripciones electorales también provocará una mayor concentración de poder en manos de los partidos mayoritarios, como Nuevas Ideas, además de ir en contra de lo dispuesto en la jurisprudencia constitucional.
De acuerdo con la iniciativa aprobada ayer, la cantidad de representantes por departamento se determinó dividiendo la cantidad de población total, según el último censo, entre la cantidad de curules, que ahora será de 60. Luego, se dividió la cantidad de población por departamento entre ese cociente. Finalmente la distribución quedó así:
San Salvador pasó de 24 a 16 Diputados o Diputadas.
Santa Ana pasó de 7 a 5 Diputados o Diputadas.
San Miguel pasó de 6 a 5 Diputados o Diputadas.
La Libertad pasó de 10 a 7 Diputados o Diputadas.
Sonsonate pasó de 5 a 5 Diputados o Diputadas.
Usulután pasó de 5 a 4 Diputados o Diputadas.
Ahuachapán pasó de 4 a 3 Diputados o Diputadas.
La Paz, pasó de 4 a 3 Diputados o Diputadas.
La Unión, pasó de 3 a 2 Diputados o Diputadas.
Cuscatlán pasó de 3 a 2 Diputados o Diputadas.
Chalatenango pasó de 3 a 2 Diputados o Diputadas.
Morazán pasó de 3 a 2 Diputados o Diputadas.
San Vicente pasó de 3 a 2 Diputados o Diputadas.
Cabañas pasó de 3 a 2 Diputados o Diputadas.
El analista criticó que se haya utilizado el Censo de 2007 y no las proyecciones de población, que están ajustadas a la actualidad, para determinar el número de representaciones que tendrá cada departamento.
Además, señaló que hay jurisprudencia de la Sala de lo Constitucional (inconstitucionalidad 9-2006) que respalda la disposición del Código Electoral según la cual el mínimo de representantes por departamento debe ser de 3. Como se puede observar arriba, con los cambios, al menos 6 departamentos quedarán con solo 2 diputados.
“La fórmula D’hondt es también proporcional, pero es menos generosa con los partidos pequeños. Si además se crean circunscripciones de 2 escaños, las posibilidades para partidos pequeños se reduce aún más”, dijo Cartagena en su cuenta de twitter.
A criterio del experto, para que la reducción de escaños no afecte la pluralidad en los departamentos más pequeños, se debió pensar en crear circunscripciones más amplias, aunque esto hubiera conllevado un proceso de estudio de la ley más largo.
Siguiente paso: los municipios
La Asamblea también recibió de manos del ministro de Gobernación, Juan Carlos Bidegain, la propuesta para cambiar la distribución político administrativa del país, para pasar de 44 municipios a 262. La nueva distribución del territorio corresponde a lo informado por Focos previamente, y confirma que las fronteras municipales actuales se mantendrán como distritos que serán administrados por delegados de las alcaldías.
“Los distritos serán administrados bajo los lineamientos del respectivo Concejo Municipal,
por un Jefe o Director, auxiliado por un subjefe o subdirector, acompañado por el personal
administrativo y técnico que considere necesario el Concejo Municipal”, señala la normativa.
Además, la iniciativa aclara que las regulaciones que ya se aplican a las alcaldías, como las leyes de impuestos y ordenanzas municipales, se mantendrán de la misma manera hasta que la Asamblea o las mismas alcaldías las ratifiquen, deroguen o reformen. Los documentos personales, como el DUI, la licencia de conducir y el pasaporte mantendrán su vigencia.
