Internas revelan las dificultades para democratizar los partidos
Tras haber anunciado las fechas de sus elecciones de candidatos a alcaldes y diputados, la mayoría de partidos políticos han tardado en publicar las listas de aspirantes a los cargos ni la modalidad que utilizarán para realizar las votaciones. La falta de publicidad en los procesos internos es solo una de las muchas debilidades de la democracia partidaria.
Diferentes analistas políticos explicaron a Focos que los procesos internos de los partidos deben respetar los mismos principios que una elección general; pero, en la práctica, los partidos políticos no siempre aplican las reglas democráticas dentro de sus estructuras.
El FMLN, Arena y Vamos son los únicos partidos que publicaron el listado de sus precandidatos a diputados, pero la información revela bajos o nulos niveles de competencia real entre sus afiliados. En el caso de Arena, se anunció una planilla única para la Asamblea Legislativa de 84 aspirantes, lo cual significa que, sin importar el número de votos que obtenga cada uno, todos resultarán electos. Por otro lado, la izquierda inscribió 93 precandidatos a la legislatura.
El partido Vamos, que publicó su papeleta de votación interna en su página web, dio a conocer los nombres y perfiles de 46 aspirantes a la Asamblea Legislativa para 43 posiciones posibles en los departamentos de San Salvador, La Libertad, Sonsonate y San Vicente. (*)
Focos solicitó a Nuevas Ideas, quien limitó los nombres de sus precandidatos para ser vistos por sus militantes, GANA y PCN sus listados de precandidatos, pero hasta la fecha de publicación de esta nota no se obtuvo una respuesta. En el caso del PDC, se explicó que todavía se encuentra en el proceso de inscripción de aspirantes.
Un estudio de Acción Ciudadana sobre la democracia partidaria advierte que las planillas únicas son comunes en los procesos internos de los partidos políticos. Eduardo Escobar, de la organización, apunta que ello puede deberse a que las cúpulas partidarias temen a la competencia porque la ven como una manera de dividir a sus partidos.
“Nosotros conocemos de casos donde, en un departamento o en un municipio, pretende competir una planilla diferente a la que ya se sabe que compite. En algunas ocasiones lo que pasa es que los dirigentes del partido hablan con estas personas y les hacen ver que es mejor para el partido que apoyen la planilla que ya estaba inscrita, para evitar divisiones, para evitar costos de la planilla y que al final todo el mundo gana”, señala.
Nuevas Ideas, el partido fundado por Nayib Bukele, es quizá el que mayor competencia presentará entre sus afiliados. El 7 de junio, El Consejo Nacional Electoral (CNE) del partido confirmó que 7 mil personas se postularon como precandidatas a cargos públicos; sin embargo, el partido no ha hecho público el listado final.
Nuevas Ideas anunció, por medio de un comunicado, que el proceso de elección se realizará por medio de una votación electrónica para evitar contagios de Covid-19. El instructivo dado a conocer por el partido explica que cada afiliado que solicite la boleta tendrá que llenar un formulario con sus datos personales antes de ejercer el sufragio y que dichos datos serán validados con la información obtenida en otros eventos de la organización. Sin embargo, no señala qué sistema informático se utilizará para el conteo de votos ni cómo se garantizará que el voto permanezca secreto y el recuento sea transparente.
Arena también realizará las elecciones internas de manera electrónica, aunque todavía no publica la información detallada del mecanismo a utilizar. Los otros partidos no se han pronunciado sobre la forma en que llevarán a cabo sus votaciones, pero se espera que también usen la tecnología.
Gracia Grande, directora de programas del Instituto Holandés para la Democracia Multipartidaria, señala que el reglamento electoral permite el voto electrónico, pero considera este mecanismo plantea nuevos retos para garantizar la transparencia de los procesos internos de partidos políticos.
“Es un poco complicado pedirle a los partidos que ellos mismos tengan los mecanismos y las tecnologías necesarias para poder garantizar que se cumpla realmente con los requisitos del voto (directo, secreto e igualitario), cuando en el pasado, incluso al hacerlo de forma presencial era difícil de garantizar también transparencia, por parte del TSE y de los mismos partidos”, afirmó.
Grande y Escobar coinciden en que el TSE no tiene herramientas necesarias para observar las elecciones de los partidos políticos. De acuerdo con la ley electoral los magistrados solo debe recibir las actas con los resultados obtenidos y tramitar la inscripción de candidaturas. Por lo demás, sus funciones son reactivas ante denuncias de los afiliados.
“El TSE solo puede tener alguna intervención en el proceso electoral interno. Uno, cuando los candidatos sufran algún menoscabo en sus derechos o se le impida a un militante competir, ahí puede recurrir al Tribunal para que la autoridad determine si se le está violando su derecho al sufragio pasivo y por lo tanto se le obligue al partido a inscribir esa candidatura. Dos, cuando se da campaña electoral fuera de los plazos de la ley”, dijo Escobar.
Grande advierte que incluso estas potestades de TSE tienen sus limitaciones y generalmente las denuncias se resuelven de manera poco oportuna, cuando ya es tarde para prevenir el daño. “Es importante en ese sentido que el Tribunal asuma mejor esa responsabilidad que tiene. Y para ello es necesario que asegurar que sea una institución objetiva, que persiga garantizar unas competencias electorales más democráticas y no proteja los intereses particulares que algunos partidos puedan tener”, explicó.
* Esta nota fue modificada el 23 de julio de 2020 con información adicional.