EE.UU. blinda la frontera sur y prohíbe asilo a migrantes indocumentados

A partir de la noche de este 4 de junio, los migrantes indocumentados que crucen la frontera sur de los Estados Unidos para huir de sus países de origen, no son elegibles para obtener un asilo humanitario, salvo contadas excepciones. Así lo indica una orden ejecutiva firmada por la administración de Joe Biden, a sólo cinco meses de las elecciones presidenciales en Estados Unidos.

Las medidas decretadas por la Casa Blanca restringen aún más las posibilidades de las personas migrantes para obtener asilo en los Estados Unidos, impulsando deportaciones exprés y procesos de solicitud de asilo más estrictas, según explicaron altos funcionarios estadounidenses. 

Esta orden es la política migratoria más severa impulsada durante el mandato de Biden, y ocurre justo en medio de su campaña de reelección para las elecciones generales del próximo 5 de noviembre de 2024.

En una conferencia de prensa telefónica, altos funcionarios estadounidenses explicaron que el decreto permitirá la deportación de personas que no cumplan con estrictos estándares de asilo.

La asistente adjunta del presidente y asesora principal para Migración y Coordinación de la frontera suroeste, Emily Mendrala, aseguró que estas nuevas medidas ejecutivas “buscan impedir que los migrantes que cruzan nuestra frontera sur reciban asilo”, y entrarán en vigor “cuando las fronteras se vean desbordadas, como ocurre en la actualidad”.

En concreto, las personas migrantes no podrán solicitar asilo si se superan los 2,500 cruces irregulares diarios durante una semana. Estados Unidos recibió, hasta abril, un promedio de 45 mil migrantes cada semana sólo en su frontera sur.

Blas Núñez-Neto, subsecretario de Política Fronteriza a Inmigración del Departamento de Seguridad Nacional, puntualizó que “no será elegible para el asilo quien cruce de forma ilegal la frontera sur”, y habrá “muy pocas excepciones para circunstancias muy serias”. 

Según el funcionario, la única forma de levantar esta restricción es que el número de detenciones baje a un promedio de 1,500 diarios durante 14 días. Una cifra tan baja de detenciones no se ha reportado desde 2020, en la pandemia.

Las medidas

1. Prohibición de asilo para cruces ilegales: Biden emitió una proclamación basada en las secciones 212(f) y 215(a) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad, suspendiendo la entrada de extranjeros que “crucen ilegalmente la frontera sur”. Esta normativa, acompañada por una regla provisional de los Departamentos de Justicia y Seguridad Interior, restringe el asilo para estos individuos. La medida se suspenderá cuando el flujo de inmigrantes se reduzca a niveles manejables.

2. Endurecimiento del proceso de asilo: El Departamento de Seguridad Nacional propuso una nueva norma para asegurar que los migrantes “que representan un riesgo para la seguridad pública o nacional” sean expulsados rápidamente, con el propósito de “mejorar la seguridad y reducir costos” por la detención prolongada.

3. Resolución acelerada de casos de inmigración: Se ha creado una lista especial de casos legales pendientes de recién llegados para resolver más rápidamente las situaciones de migrantes que cruzan ilegalmente, permitiendo una expulsión más rápida de “quienes no tienen una base legal para permanecer en el país”.

4. Revocación de visados: El Departamento de Estado también anunció que impondrá restricciones de visado a ejecutivos y funcionarios que se benefician del tráfico ilegal de migrantes; así como a ejecutivos de empresas de transporte y a funcionarios nicaragüenses involucrados en la venta de visados de tránsito.

Una restricción de derechos

La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), emitió un comunicado este 4 de junio expresando su preocupación por las nuevas medidas de asilo anunciadas por Biden. 

Con estas medidas, advierten, Estados Unidos “negará el acceso al asilo a muchas personas que necesitan protección internacional, dejándolas sin una opción viable para buscar seguridad e incluso en riesgo de ser devueltas a situaciones peligrosas”. 

“Cualquier persona que afirme tener un temor bien fundado de ser perseguida en su país de origen debe tener acceso a un territorio seguro y que su solicitud sea evaluada antes de ser deportada o expulsada”, indicó el organismo.

Esta no es la primera vez que el gobierno de Biden impone restricciones para la migración: en mayo de 2023, con el fin del Título 42, el Departamento de Seguridad Nacional y el Departamento de Justicia comenzaron a expulsar a personas que no lograran justificar el temor de regresar a su país.

El Título 42, una medida adoptada por el republicano Donald Trump, sirvió para expulsar a más de 2.8 millones de personas migrantes de forma automática, con el pretexto de la pandemia. La medida también fue utilizada por Biden hasta el 12 de mayo de 2023.