“Necesitamos abordar el problema estructural de la discriminación social”

Erick Iván Ortiz Godoy (Santa Ana, Santa Ana, 14 de febrero de 1991). Tiene estudios de Economía y, aunque no tiene experiencia en cargos públicos, participó anteriormente en política partidaria con Alianza Republicana Nacionalista (Arena). Actualmente es aspirante a diputado de la Asamblea Legislativa, en la quinta casilla departamental de San Salvador con Nuestro Tiempo.

¿Por qué meterse en política pública partidaria en un órgano tan desprestigiado popularmente?

Porque es allí donde, finalmente, se desarrollan las leyes; donde está la oportunidad de transformar las realidades de las personas y, si bien la Asamblea Legislativa, actualmente, no goza de una buena popularidad, producto de una gestión que no representa a la ciudadanía, lo cierto es que sigue siendo el órgano que en democracia está llamado a legislar. Entonces, como personas LGBTI, ese ha sido un espacio que se nos ha escapado desde la representación política directa, es mi mayor motivación para participar.

¿Por qué participar con el partido Nuestro Tiempo?

Porque es la única plataforma partidaria que es coherente, inclusiva y novedosa. Si nosotros vamos a los principios del partido, encontramos la diversidad como uno de sus ejes transversales. Y en la plataforma legislativa del partido, también encontramos que los derechos humanos son uno de sus cinco ejes y, por tanto, una de las áreas en las que yo, particularmente, tengo mayor interés de que avancemos en El Salvador. 

¿Cuáles son los tres elementos esenciales que destacaría para la defensa de la democracia en nuestro país?

La representación en términos reales; es decir, poder tener una pluralidad de experiencias de vida, de formas y de pensamientos en la Asamblea. Esto es que la ciudadanía nos tomemos un  rol protagónico en la defensa de la democracia y, finalmente, una consolidación institucional, porque creo que, en el largo plazo. El país lo que necesita es que sean las instituciones las que se consoliden y no dependan de las personas que están en el cargo en algún momento determinado; son las instituciones las que tienen que mantenerse en el tiempo. Entonces, lo resumiría en esas tres cosas: participación, institucionalidad y representación.

Si tuviera el poder, ¿cuál sería el principal cambio que haría en la Asamblea?

Creo que necesitamos abordar el problema estructural de la discriminación. En El Salvador, tenemos un patrón sociocultural que discrimina a las mujeres, a las personas LGBTI, a la juventud, cuando se les criminaliza por las zonas en las que viven; a las personas con discapacidad, a los pueblos originarios, a las personas afrodescendientes. Encontramos que, de hecho, una mayoría de la población puede ser sujeta a patrones de discriminación y, por tanto, para mí es importante impulsar una Ley Especial contra la Discriminación que nos ayude a propiciar este cambio cultural, que no es en beneficio de poblaciones en específico.

Cuando entendemos que la no discriminación debe ser un patrón dentro de la cultura ciudadana y cívica de las personas, estamos construyendo un futuro donde niños y niñas van puedan crecer en entornos seguros y construir la confianza en sí mismos y sí mismas; y la posibilidad de poder integrarse de mejor manera y poder generar una convivencia más sana entre la ciudadanía.

De ser electo, y si sólo pudiera hacer una cosa, ¿qué reforma o aprobación de ley sería su principal apuesta?

La aprobación de la Ley Especial contra la Discriminación.

¿Cree que existirán los votos para ello?

Sí. Creo que existirían; en el discurso público, la enorme mayoría de las fracciones legislativas, inclusive en la última campaña presidencial escuchamos que los tres candidatos a la Presidencia estaban en el entendido de que la no discriminación es importante y también podemos encontrar esas mismas respuestas en otros espacios, como iglesias, cámaras empresariales y otros; entonces, si en el discurso público se entiende que la no discriminación es la aspiración a la que todos estamos de acuerdo que todos deberíamos llegar, no debería haber ningún obstáculo para que en la Asamblea Legislativa las distintas fracciones podamos apoyar la aplicación de esta ley.

¿Su plataforma legislativa difiere o no de la plataforma de su partido?

No. De hecho, los tres ejes que incluye mi plataforma individual, en Inclusión Social, están representados en la plataforma del partido. Estos son la Ley Espacial contra la Discriminación, la Ley de Identidad de Género y el matrimonio igualitario.

¿Para usted, los/as diputados/as son autónomos de las decisiones de su partido o no?

Sí. Eso dice la Constitución, de hecho. Cada uno de legisladores y legisladoras nos debemos a las personas que estamos representando. Los partidos son, al final, los instrumentos políticos con los que se accede al poder, pero nos debemos a la ciudadanía que nos eligió.

¿Cómo defendería su voz propia y su decisión de voto, si es contraria a la de su partido?

Para eso es importante sentar posturas claras desde el inicio. Soy de las personas que cree que las relaciones se construyen, sean humanas o institucionales, sobre la base de la verdad y de la autenticidad. En mi caso, eso es por lo cual yo soy un hombre abiertamente gay, se sabe cuáles van a ser las luchas que yo voy a dar dentro de la Asamblea y esa misma claridad, que desde el inicio he tenido como activista social y hoy como candidato, y ojalá en el futuro como diputado, esa misma honestidad, transparencia y contundencia, en el apego a las propuestas y a los principios que tengo, son la garantía más fuerte de mantenerme con ellas. 

El Gobierno, a través del vicepresidente, estudia una reforma constitucional. ¿Estaría dispuesto a apoyar la ampliación a 6 años del ejercicio presidencial y reducir el período que debe esperar un presidente para volver a postularse (reelección no continua)?

Creo que hay que estudiar todas las reformas a la Constitución que se puedan proponer. Hay que pensar que las leyes deben de adaptarse a los tiempos. Sin lugar a dudas, creo que el tema de los períodos electorales es un tema que se tiene que discutir, en la medida en la que el país vive periódicamente en elecciones y cada una tiene altos costos para la ciudadanía.

Por la operatividad de las elecciones y de los diferentes gobiernos: municipal, central y diputaciones, hay que encontrar una forma que sea, efectivamente, más eficiente. En ese sentido, hay que estudiar todas las reformas que se propongan.

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De ser electo, ¿apoyaría la aprobación de…?

a.   Ley general de agua: sí.

b.    Ley de identidad: Sí. De hecho, es parte de mi plataforma legislativa. Creo que esta es una de las muestras de la discriminación sistemática que produce el Estado salvadoreño, en la medida en la que la Constitución reconoce que la identidad es un derecho constitucional de todas las personas. Y el Estado, en el caso de la población de hombres y mujeres trans en El Salvador, es un derecho que les ha sido negado y, por lo tanto, también les violenta todos los derechos derivados al respecto de la identidad; estamos hablando de derechos económicos, sociales y políticos.

c.     Despenalización del aborto en causales específicas (“las 4 causales”): Sí. Creo que las mujeres pueden encontrar en mí siempre un aliado por la defensa y la salud y la vida de las mujeres y las niñas y, en ese sentido, también encontrarán en mí, siempre, un aliado por la despenalización del aborto.

d.    Acuerdo de Escazú: También. Sin lugar a dudas, el reto más acuciante que tenemos como humanidad, a la par de otras problemáticas sociales, es el del cambio climático y, sin lugar a dudas, sin planeta y sin medioambiente no hay ninguna lucha que tenga sentido. Por lo tanto, la lucha por el medioambiente debe ser una de las luchas centrales de cualquier candidatura. Sí aprobaría el Acuerdo de Escazú. 

e.    Ley de la Función Pública: Sí. De hecho, es parte de nuestra propuesta legislativa como Nuestro Tiempo. En todo el partido estamos en el sentir de la necesidad de la aprobación de esta ley.

f.    Reforma integral de pensiones: Más allá de una reforma al sistema de pensiones, hablaría de la necesidad de construir un nuevo sistema de pensiones porque reformas se han hecho, habitualmente parches de reformas, y lo que se necesita es el planteamiento de un nuevo sistema que garantice pensiones dignas en el futuro para todas las personas. 

g.   Reforma integral al transporte público: sin lugar a dudas. Soy del criterio que, en el Área Metropolitana de San Salvador (AMSS), hay una necesidad de centralizar el servicio de transporte colectivo. No es posible que existan tantas líneas de transporte que, en la actualidad, en la mayoría son administradas por casi que mafias de empresarios que están condenando a un transporte altamente deficiente, inseguro y contaminante.  Esto es un eje central en el desarrollo de las poblaciones que habitamos en el AMSS. Por lo tanto, hay que implementar una reforma profunda al sistema de transporte colectivo, específicamente en el área metropolitana; hay que recuperar el proyecto del sistema BRT, que es el sistema que está aplicado en el plan del SITRAMSS. Estos buses y el sistema son parte de la solución que se necesita para el tema del transporte y el congestionamiento en San Salvador, porque tienen a su base una lógica que trasciende el transporte y llega a la movilidad urbana, que es  lo que necesitamos en realidad abordar como área metropolitana.

“Lo primero que hay que hacer es no seguir aprobando el subsidio a los transportistas y empezar a invertir, decididamente, en un sistema que sea seguro, ágil, eficiente y no contaminante.
Erick Iván Ortiz, candidato a diputado con Nuestro Tiempo.

h.    Reformas a la Ley de Acceso a la Información Pública (LAIP): Sí, creo que hay que robustecer el Instituto de Acceso a la Información Pública (IAIP) y es parte también de la plataforma de Nuestro Tiempo. Necesitamos garantizar un presupuesto independiente y garantizar la elección de comisionados y comisionadas de forma independiente.